domingo, 15 de noviembre de 2009

Pintura del Ecuador


Los principales elementos de la pintura ecuatoriana son: primitivos americanos, españoles, italianos, bizantinos y mudéjares. El estilo renacentista español se implantó en Ecuador a mediados del siglo XVI por obra del escultor Becerra, Rápidamente el herrerismo se empapó del medio americano, naciendo así el barroco mejicano, quiteño y cuzqueño. El barroco nació en Italia en los templos jesuitas y llega al Nuevo Mundo como el estilo jesuita, surgiendo así la segunda etapa de la pintura ecuatoriana. La tercera etapa de la historia de la pintura ecuatoriana es representado por el churrigueresco que es la musicalización más dinámico y retorcido del barroco, así los elementos decorativos europeos se juntan con los americanos, observamos junto a los acantos y a las uvas, las piñas y los aguacates; entre la hojarasca clásica, la hojarasca de la selva tropical, junto a los ángeles y cariátides, monos y máscaras de salvajes americanos.





Los pintores ecuatoriano: Alfonso Chacha, Andrés Sánchez Gallque, Francisco y Jerónimo Vilcacho, Cristóbal Naupa, Juan José  Vásquez, Sebastían Gualoto, Francisco Grijal...

 



La Pintura Quiteña del Siglo XVIII: En este siglo los grandes genios de la centuria pasada son reemplazadas por familias.  Entre éstas las principales son:
- Familia Albán: Dedicada a la pintura y al dibujo folkórico, descriptivo  del Nuevo Mundo,  Recordemos entre ellos a Carlos, Francisco y Vicente.  Sus obras son conocidas en Quito y el Museo de Madrid.
- Familia Cortés: Sus exponentes son: José Cortés de Alcocer, Casimiro, Francisco Javier, Antonio y Nicolás, sobresalieron en dibujo, grabado, pintura, en lienzo y en muro.
- Familia Cabrera: Anadió a la colección religiosa la imagen del Buen  Pastor. Representada por Tadeo y sus dos hijos, Nicolás y Manuel.
- Hermanas Dávalos Maldonado: Sobresalieron en la música, dibujo, la  pintura, la escultura.
Como figuras individuales de calidad tenemos a Bernardo Rodríguez, pintor que se inclina por los colores claros, en una técnica popular y graciosa.  Contribuyó grandemente en la difusión de la devoción a la Virgen de la Merced, en la segunda mitad del siglo XVIII.  Cuya obra más significativa es  El cuadro de las almas existente en la Sacristía de Santo Domingo.  También hallamos lienzos de él en el Museo Franciscano y el Museo Jijón y Caamaño.


 
Los cuadros mas famosos: 

( Infanta de castilla)




(San Pedro Martir de Verona Padre Bedón.)



( La Doctrina Cristiana)


( El Profeta ageo)

Conclusiones:

La pintura utiliza  el color eufóricamente y crea una escuela mucho más próxima a la  realidad humana y a la cultura.
La pintura en estos siglos siguió el camino religioso: los artistas interpretaron la fe del pueblo y los gustos del Clero, acorde a los dictámentes del barroco reinante.
Las primeras manifestaciones artísticas nacieron en los templos, con maestros religiosos.  Entre ellos tenemos a Frya Pedro Gosseal y   cialmente a Fray Pedro Bedón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario